Punta Rasa es una reserva natural dispuesta en las cercanías de la ciudad de San Clemente, allí donde el Río de la Plata se une con el Mar Argentino, donde con diferencia de apenas un par de metros se puede escuchar el viento sobre el agua calma del río o el oleaje constante del mar, y donde, según leí en internet, se da un fenómeno que puede verse en pocos lugares del mundo, como es que sol salga sobre el mar y se ponga sobre el río.
Sobre Punta Rasa ya hablamos en este post anterioremente, y ahora llega el momento de contarte sobre el mirador de aves que se inauguró en febrero de 2015, y que sirve como punto de observación y estudio de las diferentes especies de pájaros que pasan por este lugar, sin necesidad de molestarlas.
El mirador en sí no es más que un refugio construído en madera con ventanales desde donde los científicos, naturistas y turistas pueden apuntar sus cámaras hacia las aves y fotografiarlas. El acceso está construido con madera también, y está bien señalizado para que no puedas pasarlo por alto muy fácilmente. Incluso los carteles indican la posible presencia de vívoras, pero cuando fuimos nosotros, por más que las busqué, no vi ninguna.
Esta es la vista que uno tiene desde el mirador.
En ese momento no se veían pájaros, pero en realidad Punta Rasa es un lugar donde se concentran en gran cantidad, porque es el punto donde hacen un alto cuando migran desde el hemisferio norte hacia Tierra del Fuego, y viceversa. Así que, como no podía ser de otra manera, luego de algunos minutos, mirando hacia arriba avistamos una bandada considerable.
Justo frente al acceso el camino se abre en una especie de estacionamiento, donde uno puede dejar el coche, así que no hay ningún impedimiento en frenar y quedarse un rato esperando el momento en que aparezca el pájaro que más te guste, y retratarlo.
Es un refugio super simple, pero de seguro tiene un gran valor para los estudiosos de todas partes del mundo que vienen a este lugar en la época migratoria. Y seguro los amantes de las aves lo agradecen también.