Uno de los clásicos atractivos de toda ciudad serrana son las vistas panorámicas. En el caso de Tandil, una de las panorámicas por excelencia es la que se obtiene desde lo alto del Parque Independencia.

Inaugurado en 1923 para el centenario de la fundación de la ciudad, el Parque Independiencia está ubicado hacia el sur de la ciudad, muy cerca del Lago del Fuerte, y en su ingreso cuenta con un pórtico donado por la comunidad italiana que no pasa desapercibido y es uno de los monumentos icónicos de la ciudad.

El parque en sí es un área de recreo al aire libre, de acceso público y gratuito, frecuentada tanto por locales como por turistas. En él se destaca el Anfiteatro Municipal que tiene capacidad para unos 5000 espectadores. Sin embargo, lo más llamativo del parque está en la cumbre del cerro que lo alberga.

El Castillo Morisco es un atractivo turístico en sí mismo. Se trata de una construcción donada por la comunidad española que alberga un restaurante. Desde allí, la vista de Tandil es excelente, pero aún se puede mejorar. En la torre del castillo hay una escalera que conduce a la terraza del castillo desde la cual las fotos son inmejorables. Un clásico del turismo tandilense es acercarse al castillo a diferentes horas del día, para apreciar la vista con diferentes tonalidades de luz.

Saliendo hacia atrás de la terraza del castillo se llega hasta el monumento al General Martín Rodríguez, el fundador de la ciudad. En lo alto también, pero mirando hacia el estacionamiento, se podrán observar los antiguos cañones que supieron estar emplazados en el Fuerte Independencia, que luego daría origen a Tandil como ciudad.

Hasta el castillo se puede subir tanto en vehículo como a pie. Como sea, el pasar por aquí es uno de los paseos obligados cuando se visita Tandil. Y por supuesto, a no olvidarse de cargar el celular, o la batería de la cámara fotográfica.