Algo que me gusta mucho cuando visito una ciudad es levantar la cámara y retratar no sólo el lugar en sí, sino momentos y, particularmente, su gente. Las personas hacen al lugar donde viven y son parte fundamental de su ADN, por lo que si fotografío una ciudad sin sus habitantes y los momentos que estos crean y viven, es como que falta algo. ¡Y algo importante!
Sin ser una ciudad, la misma sensación me invadió cuando estuve en la Oktoberfest, en Munich el año pasado. La realidad es que la fiesta no es la bebida, aunque la cerveza sea por supuesto la protagonista. La fiesta la hace la gente, con sus trajes típicos, cantando y bailando y pasando un momento inolvidable. Es por eso que no podía faltar la galería de imágenes de la Oktoberfest, enfocada puntualmente en su gente.
Gente que festeja, bailando sobre los bancos y hasta sobre las mesas, aunque sin hacer desmanes.
Algunos lo hacen en grupo, otros en pareja.
Todo al son de la orquesta.
Y sin ser parte de la orquesta, siempre están los que ponen su cuota para animar la fiesta.
Claro que en la Oktoberfest, la animación está garantizada por un líquido dorado.
Entre tanto jolgorio, las meseras sí que laburan.
Pero también se toman un momento para la buena onda.
Aunque parezca mentira, entre tanta gente siempre hay alguna que otra chica sola.
Están las que aunque presentes, parecieran estar ausentes…
Las que definitivamente están presentes…
Y las que parecen tristes, entre tanta alegría que se ve alrededor.
Por supuesto que, con música y cerveza, es probable que aunque estén solas, se crucen las miradas.
Y al cruzarse las miradas, con chopp en la mano, seguramente amerite un choque de vidrios y un fuerte «Prost!»
El paso siguiente, es salir a bailar.
Personajes hay para todos los gustos.
Con mucho pelo, sin nada de pelo y hasta con gorritos.
Y cómo decirle que no cuando te ofrece un sombrero, no pelado?
A los Prätzel los vende un muchacho, pero igual es difícil decirle que no, aunque en este caso es por lo rico.
«Sí, yo también quiero!!»
No sabemos si es por la cerveza, pero en la Oktoberfest la gente suele estar feliz.
Es escenario de lindos encuentros.
Y de escenas de amistad fraternal.
Una interesante y recomendable experiencia. En este post de la Oktoberfest están los datos de la del 2018 para que puedas anotarte. ¡Ella te invita!
Agradezco la colaboración de mi amigo A.H. ya que algunas de las fotos de este post son de su autoría.
Y vos, no te quedes sólo con las fotos. Organizá el viaje, y viví la próxima Oktoberfest!.