Hace algunas semanas atrás les hablaba de la hermosa ciudad de Brujas, en Bélgica, lugar que conocí un poco más al realizar un walking tour, y donde visité la Basílica de la Santa Sangre de Jesús, tal como pudieron leer en los respectivos posts. Pero las fotos fueron tantas que dos posts no alcanzaban para mostrarlas, por lo que aquí les presento una recorrida en imágenes por este lugar que parece salido de un cuento.
Arrancamos caminando sus tranquilas calles, aunque no necesariamente eso signifique la ausencia de automóviles.
Si hasta hay calles donde no se les permite ingresar…
Claro que son mucho más comunes los botes que los autos.
Cualquiera de nosotros puede navegar los canales de Brujas. Sólo hay que encontrar esta casillita y comprar el ticket correspondiente.
Y en Brujas la realidad es que hay cualquier cantidad de canales para navegar.
¡Las mismas casas parecen estar casi sobre el agua!
Claro que también se puede recorrer la ciudad con otros medios de transporte…
Buscando la plaza principal nos topamos con una de las muchas iglesias del lugar.
Y finalmente llegamos. Bien podríamos haber ido en bicicleta, nadie nos habría mirado raro.
Como presidiendo, la torre del reloj se alza al frente de la plaza.
La recorrida por Brujas incluye arquitectura típica por todos lados.
Incluye también monumentos a personajes ilustres de la ciudad.
Pasamos por innumerables canales.
Y por supuesto: donde hay canales no pueden faltar los puentes…
Ya acostumbrados al turismo que llega desde todas partes del mundo, los personajes de Brujas no se inmutan a nuestro paso.
Pero sinceramente, ¿qué personaje local puede ser más simpático y fotogénico que una pareja de recién casados?
¡O los invitados a la boda! Aquí la chica de los globos…
Claro que siempre está el que se lamenta: «¿Qué hizo?». ¿El padre de la novia, quizá?
Y también están los que aprovechan. Ehhhh, la manito por favor!!!
Felices, los novios se retiran a comer perdices.
Hay quienes quedaron duros, pero no a causa de la boda.
Y esta joda que nos encontramos mientras caminamos tampoco tiene nada que ver con el casorio.
No sabemos dónde era la fiesta de casamiento, pero lo que sí sabemos es que los invitados no almorzaron acá. Nosotros tampoco.
Ya lo dije en otro post pero Brujas es un lugar que habría que conocer no sólo de día, sino también por la noche. Para eso será necesario un buen alojamiento.
Me imagino que navegar uno de estos canales por la noche debe ser una muy linda experiencia.
No se si será habitual, pero caminando por Brujas yo me encontré con este coro cantando.
Y para cerrar el post, nada mejor que la foto de un cisne. Si querés saber por qué esta imagen es ideal para el cierre, te invito a leer el post sobre el walking tour de Brujas y enterarte.
Aún quedan posts sobre Bélgica para publicar. No te los pierdas las próximas semanas en Ahicito Nomás.