Cuando uno viaja a Europa todo lo que siempre resulta terriblemente lejano, de repente parece increíblemente cerca. Pasar de un país a otro es fácil, rápido, y casi siempre también barato. Entonces uno siente la tentación de recorrer tantas ciudades y países como sea posible. Ya sea que caigas en esa tentación, o que optes por una recorrida más tranquila y pensada, sin tantas ciudades en el itinerario, lo más seguro es que si los tiempos de la estadía te dan, visites más de una localidad.
Y si visitás un lugar lo querés conocer, aunque sea un poco. Yo soy de los que piensan que la mejor forma de conocer una ciudad es caminarla, y hacerlo lo más posible. Pero caminarla sin saber por dónde se está yendo, qué significa el monumento que estás fotografiando, o sin darte cuenta que quizá la calle que estás cruzando es un lugar histórico de importancia, es como que no tiene mucho sentido.
Lo bueno de todo esto es que no es necesario gastar grandes sumas de dinero para hacer tours en los lugares que visites. Puntualmente en Europa, una alternativa muy común y muy buena es la de los Free Walking Tours, como los que hice en Madrid, Bruselas; Brujas y Hamburgo, y cuyos detalles ya te iré contando en los próximos posts. Pero esta publicación no es para hablar de uno en particular, sino de ellos en general.
Los walking tours son paseos donde un guía te va llevando por la ciudad y te explica cuestiones de interés de la misma, ya sean culturales, históricas o incluso curiosidades y actualidad. Además, los guías suelen estar al tanto de lugares para ir a comer o tomar algo; y si se les consulta suelen tirar buenos consejos al respecto. Los tours son gratis, y la única paga para los guías son las propinas que uno le deja al final, cuyo valor depende de cómo evalúes el tour: si considerás que el guía le puso ganas y la recorrida te gustó, dejás una buena propina; mientras que de lo contrario le bajás vos mismo el precio al paseo.
Los guías no son todos iguales, y cada uno le da su tono al tour. En general te cuentan historias o anécdotas interesantes o curiosas sobre la ciudad. No hay forma de saber si todo lo que te dicen es 100% verdad, pero bueno, la historia en sí misma es así, no? Como sea, los walking tours son una excelente forma de saber algo más sobre la ciudad que estás visitando, de forma rápida y económica. En general se reunen en horarios determinados en lugares céntricos, y uno los identifica por los paraguas característicos que utilizan para convocar a la gente. Al menos en las ciudades donde los hice yo había siempre guías que hablaban español, así que el idioma no sería un problema.
Para ubicarlos hay que buscar los paraguas como los que se ven en las fotos; consultar en la oficina de turismo local, en el lugar donde te estés alojando, o incluso podés buscarlos por internet. Aquí te dejo el link a dos de las empresas con las que hice tours yo:
Sandeman: http://www.neweuropetours.eu/
Viva Brussels Tours: http://www.vivastour.com/
Seguramente haya otras opciones. Es sólo cuestión de buscarlas!
No hace falta reserva previa, ni nada. Uno va hasta el punto de encuentro indicado a la hora determinada, y allí busca los paraguas. Sí es recomendable llevar una botella de agua o alguna bebida, ya que caminando te da sed y si en el medio del tour te parás a comprar algo es probable que pierdas al grupo.
Espero que este post te sirva para conocer un poco más de dónde estás la próxima vez que viajes a Europa! Y por supuesto, si tenés experiencia con este tipo de tours tus comentarios son bienvenidos!
Wow!
Está super padre que des este tipo de consejos tan útiles para los que queremos irnos de mochilazo por tours a Europa.
Gracias por compartir!
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Gracias por comentar Clementine!
Esa es la idea del blog, mostrar los lugares donde voy y compartir las experiencias para que les sirva a los demás!
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