Con sus arquitecturas coloniales, calles de empedrado, antiguos cañones sobre la muralla y el faro custodiando la costa, Colonia es un lugar ideal para explayarse fotográficamente. Aquí un recorrido en imágenes por el centro de la ciudad.
Arrancamos el paseo desde el puerto hacia la histórica muralla. El faro nos guía.
Desde afuera de la ciudadela, por sobre la muralla, los cañones amenazantes.
La muralla resguardaba la ciudad desde el río.
El ingreso a la ciudadela estaba controlado a través de un puente levadizo.
Ese día eramos muchos los que entrábamos…
Detrás de la muralla comienza el Barrio Histórico.
Con calles y construcciones bien coloniales.
Entre ellas se cuenta «La Casa del Virrey», aquella en la que aparentemente se habría hospedado Cisneros cuando al llegar para tomar su cargo se encontró con una Buenos Aires muy revolucionada.
Y también, por supuesto, la famosa Calle de los Suspiros.
En las calles se puede ver también muchas flores.
La Santa Rita, con sus flores rosas, es la planta típica y es parte de las postales de Colonia, casi tanto como los adoquines o las carretas. Ahora bien, si salen todos juntos en una misma foto, mucho mejor!
Las flores adornan también las casas.
Y sus ventanas…
Mientras que otras casas no tienen flores, pero igual son pintorezcas y merecen una foto.
Con tanto sol y calor, es necesario hacer una parada intermedia antes de seguir camino. Un helado no viene nada mal, y mucho menos si es un helado especial…
Otra parada totalmente válida será para degustar una típica cerveza uruguaya, y claro, como siempre que hay una Canon, hacer algo de arte con la cámara.
Nosotros no eramos los únicos que hacíamos arte, por supuesto. Algunos, casi fieles a la típica costumbre argentina, hacían «arte atado con alambre»
Y por supuesto que en la plaza no podían faltar los artesanos en sí.
Allí mismo, frente a la plaza, uno se encuentra con el faro, símbolo de Colonia.
En las paredes del viejo convento en ruinas, al lado del faro, las palomas crearon sus hogares, y si se presta atención se las puede ver por doquier.
Sin embargo Colonia no es sólo Barrio Histórico. Alejándonos un poco también encontramos lindas calles para recorrer.
Algunas van hacia el río, y te llevan hasta otro lindo lugar de la ciudad: el puerto de veleros.
Este era el puerto natural, por el accidente geográfico del territorio, y donde por supuesto se enclavó el original. Pero cuando se mudó a su locación actual, los veleros y sus regattas se adueñaron de este lugar.
Así finaliza nuestro recorrido fotográfico por Colonia, ciudad a 6 metros sobre el nivel del mar, medido con el puerto de Montevideo como base.
Próximamente habrá más posts sobre los atractivos de esta ciudad. Mientras tanto, te espero el lunes próximo, con otra entrega de Ahicito Nomás.