Hace rato que vengo pensando en un post que trate de explicar qué pasa con los electrónicos en Argentina y por qué tienen los precios que tienen cuando vamos a comprarlos. Pero fue en esta última semana que vi cómo la poco feliz imagen de aquí abajo comenzó a multiplicarse en Facebook y me preocupó ver que tanta gente argumentara a favor o en contra, pero siempre dando por certeros y lógicos los postulados que la placa ofrece, cuando en realidad lo que hay que hacer es desestimarlos por ser incoherentes. Esta imagen me servirá de disparador del tema del que quiero hablar, pero antes de entrar en el mismo quiero explicarte por qué a esta imagen no tenés que darle bola.
En principio tengo que decir que no tengo elementos objetivos para evaluar la situación de la salud y la educación, y sus costos, en Estados Unidos como para hacer una análisis certero. Lo que sí tengo son los comentarios de colegas norteamericanos que cuando vienen a Argentina se quedan sorprendidos con nuestro sistema de seguridad social: básicamente allá estás bien si tenés trabajo, pero si perdiste tu empleo quedás a la buena de Dios, por lo tanto ellos ponderan mucho los hospitales gratuitos que tenemos. En cuanto a la educación, en Argentina tenemos universidades públicas de muy alto nivel, mientras que en países como Chile la educación universitaria es un privilegio reservado para los pocos que pueden pagarlo. Ambos, salud y educación gratuitas, son dos derechos que los argentinos supimos ganarnos y que debemos aprender a mantener y defender. Ahora, que el nivel de ambos esté bajando de forma alarmante es otro tema, que debemos pedir a nuestros gobernantes que atiendan urgentemente.
Pero esos no son los puntos por lo que tildo a la imagen de poco feliz. De hecho, son puntos en los que conceptualmente coincido plenamente. El problema está en la comparación que hace con el Iphone, que no tiene pies ni cabeza, y en la aseveración que deduce que como tenemos educación y salud gratis está bien que un celular salga el triple porque se trata sólo de una cuestión de prioridades. Una cosa no tiene nada que ver con la otra. En el barrio diríamos que están comparando peras con bananas. Yo digo que, además de incoherente, es una visión conformista: si pudiéramos tener celulares a precios decentes, además de salud y educación gratis, ¿por qué no ir por ello?
En primer lugar hay que decir que el que eligió el Iphone para armar esta placa la pifió tremendamente. Por el momento Apple no importa ni distribuye sus celulares en Argentina, así que me gustaría saber cómo es que hizo el ideólogo de la comparación para determinar su precio local en ARS 15000. Hoy no existe forma legal de comprar un Iphone en un comercio argentino, por lo que o bien se lo comprás a alguien que haya viajado y lo trajo del exterior utilizando el régimen de equipaje, o bien estás comprando un artículo de contrabando. Ambos supuestos invalidan la comparación ya que evitan la cadena normal de logística y distribución, pero además, el segundo es ilegal. En todo caso, hoy es imposible determinar fehaciente cuál es el precio de venta al público de un Iphone en Argentina.
Sin embargo la placa marca una realidad, pero para hacer un análisis coherente vamos a cambiar el Iphone por un celular que sí se comercialice en Argentina y que entonces nos habilite una comparación de precios. Tomemos entonces el Samsung Galaxy S6 de 32 MB.
Un celular que on line en Estados Unidos se consigue a USD 680, en iguales condiciones en Argentina sale ARS 14999, que a tipo de cambio oficial del 31 de julio equivale a USD 1631, es decir que acá cuesta USD 951 más caro.
¿Es lógico que un celular salga más del doble si lo compras en Argentina que si lo adquirís en el exterior?
Lei por ahí en los comentarios del Facebook que eso se debía a fletes y barreras arancelarias. Eso es falso, o como mínimo, inexacto. Que se pagan aranceles de importación es verdad, pero el máximo nivel arancelario permitido por la OMC es del 35%, lejos estamos del 140% de diferencia al que equivale el precio local. En cuanto al flete hay que decir que este celular no se fabrica en Estados Unidos sino en Oriente, por lo tanto el precio en el hemisferio norte también tiene cargado el costo del flete. Que el transporte hasta Argentina sea más caro es una posibilidad, pero no hay forma de que esa diferencia justifique el precio que nos cobran aca. Incluso requeriría un análisis más profundo con datos que no tengo a mano, pero en los últimos meses las tarifas aéreas de China a Estados Unidos estuvieron en las nubes, así que hasta podríamos llegar a poner en duda lo del transporte más caro para llegar a nuestro país.
¿Está bien que nos conformemos con pagar esos valores porque no es un bien indispensable?
Claramente, no. Y aquí el centro de mi crítica a esta placa. Que un celular me cueste ARS 15000 no es lógico y no deberíamos aceptarlo tampoco, si es que hay medios para hacer el proceso más eficiente y por lo tanto, más económico. Y que avancemos en ser más eficientes en la distribución de un electrónico no afecta en nada el sistema de salud o educación, ni sus costos. Al contrario, en todo caso ahora que todo tiende a depender cada vez más de la tecnología, su alto costo va a impactar también en los servicios públicos. Cambiemos por ejemplo en la placa el Iphone por las Netbooks que entrega el gobierno en los colegios: si tuvieran un precio lógico costarían menos en el presupuesto de educación, dinero sobrante que podría asignarse, por ejemplo, a docentes mejor pagos. En cambio, si cuestan el doble, como aquí el Iphone, se trata de dinero desperdiciado y podría llegar el momento donde nuestros impuestos no alcancen para financiar la compra y por lo tanto, o se deje de utilizar esa tecnología en las aulas, o haya que pagar un bono extra para poder acceder a ella. Ahí vemos cómo la idea de esta imagen es realmente indefendible por dónde se la mire.
Ahora bien, nos queda una pregunta pendiente: ¿Por qué vale eso un celular?
Bueno, como todo, la diferencia de precios tiene sus razones. Si querés entender por qué tenés que pagar un celular más del doble de lo que lo abonarías en el exterior, te invito a pasar por el post de la semana que viene. No vamos a descubrir la pólvora ni ninguna fórmula mágica, tampoco vamos a poder responder la inquietud en un 100%, pero sí vamos a analizar el componente logístico al que están sometidos hoy en día los electrónicos en Argentina, y que si bien no determina el precio final, sin duda influye en el mismo y mucho. Así que si te interesa te espero el martes, por este mismo canal.
Las cosas valen lo que la gente las paga!!!
Y es como todo en la sociedad, si hay una baja oferta y una alta demanda los valores suben. Y vivimos en un pais donde la gente piensa que ES por lo que tiene.
En mi caso soy usuario de iphone desde hace muchos años, aunque en realdiad soy usuario de la marca hace mas todavia. Pero hay gente que viaja en colectivo, le cuesta llegar a fin de mes…pero tiene iphone. El problema no esta en los aranceles ni que un iphone en argentina cueste esa guita, el problema esta en que para mucha gente tener ese tipo de objetos es sentirse dentro del sistema, dejando de lado aunque sea solo por un rato esa sensacion de exclusion.
En cuanto a economia se refiere cualquier comparacion carece de objetividad. por que hay que analizar el contexto.
abrazo adri.
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Gracias por el aporte!! De hecho te estás metiendo de lleno en el post de la semana que viene, y yendo más allá incluso, ya que el tema del status yo no lo estoy incluyendo en el análisis pero, como vos decís, hace también a la formación del precio.
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